Media sentencia (II)


Y sigue la historia. Un caluroso día de julio lo presentaron al poble català para que dijese si le gustaba o no… y la mayor parte del poble català decidió que hacía una calda de collons (o como dicen los gallegos, un sol de carallo) y se fue a la playa. De forma que fue aprobado por los incombustibles, los cautivos y los engañados (y alguno más que tuvo la mala suerte de pasar por allí). De nada sirvió que el PP dijera que el recurso contra el Estatut era sólo algo pequeñito: la izquierda rampante aprovechó para tacharlos de fachas-y-bla-bla-bla… Claro, entonces aún no se olía la crisis como ahora y las posiciones estaban mucho más enconadas. Mr. Bean apoyó –y lo sigue haciendo- el engendro. Por eso ahora sale ese encantador de serpientes llamado Rubalcaba («Floriano, sé todo lo que dices y todo lo que haces») diciendo que «es mentira que se rompe España» y otras necedades semejantes (siempre puede decir que se lo ordenó Mr. Bean, pero…).

La tercera y muy pertinente es relativa al poble català. Ya hemos visto que el 19 de julio de 2006 decidió irse a la playa en vez de dar gusto a Carod, a Montilla y a Saura. Y ahora les ha vuelto a fallar. El coñazo identitario no hace mella en la mayoría de este poble, que en vez de «celebrar (¿?) la sentencia» y tragarse el «especial Estatut» de la TV-dels-tres ha preferido ver cómo España daba el pasaporte a los portugueses en el Mundial de las vuvuzelas. Amor con amor se paga. Naturalmente, los convencidos obvian ese detalle pequeñito y se aferran al dato de los que votaron, una parte también pequeñita del censo. Y están que trinan porque Mr. Bean no ha podido evitar que tocaran unas cuantas comas. Tal como prometió Montilla, éste parece que va a ser en Cataluña un verano identitario, del que ustedes se van a librar si no residen en estas sufridas tierras.

La cuarta se refiere a lo que el TC ha dejado en pie. Sí, es verdad: se ha cargado el concepto de nació catalana, evidentemente muy contrario al art. 2 de nuestra norma fundamental, que habla de la solidaridad interterritorial, que los nacionalistas entienden en una sola dirección, y de la indisoluble unidad de la nación española (para ellos, al menos, ése no es un concepto discutido y discutible). Y sí, se ha cargado el Consell de Justícia de Catalunya, cabeza de puente para instaurar un poder judicial propio, lo cual es ciertamente contrario al art. 117.5 de la CE. ¿Se los imaginan con un Poder Judicial propio y sin independencia cuando el caso tiene relevancia política? Més contents que un gínjol, que diríamos aquí (traducido: más felices que unas lombrices). Los casos Pretoria, Palau y demás no hubieran pasado de ser una anécdota sin importancia.

Pero junto a esos retoques de bulto, parece ser que el Alto Tribunal ha hecho encaje de bolillos para no cargarse la cobertura estatutaria del medio centenar de leyes de desarrollo que ha dictado la Generalitat. Entre otras, leyes que tocan muy de cerca al ciudadano: como por ejemplo, la que le impide escolarizar a sus hijos en castellano. O la que le obliga a rotular almenys en català su comercio, si la crisis no le ha obligado a cerrarlo. Lectura: a los ciudadanos, a los que no nos debemos, que les vayan dando.

La observación final (para no hacerles el cuento muy largo) va referida al hecho de que hay que «alegrarse» de que los nacionalistas no hayan podido colar por el escotillón la Constitució de la I República Catalana. Tots contents, que diríamos aquí. Hasta Sánchez Camacho se «alegra» de la sentencia y no va a mover un dedo para que el Alto Tribunal amplíe la sentencia y declare más artículos inconstitucionales. Ahora que ya ha salido del ghetto del Tinell, no quiere volver a él. Está más pendiente de meterse en la cama (políticamente hablando, desde luego) con el Príncipe Encantador que de servir a los ciudadanos. Lo mismo que Rajoy quiere hacer en Madrid con Duran Lleida, el lama baturro reconvertido en català de soca-rel. A Rajoy, como a Sánchez Camacho, les da igual que se proclame o no la I República Socialista Catalana Independent, siempre y cuando ellos puedan pillar cacho.

Unos políticos enanos consiguen que el país se acabe pareciendo a ellos.

3 comentarios en “Media sentencia (II)

  1. Por diversos motivos hace tiempo que no entraba en tu blog . Del tema de la Sentencia del Estatut no puedo opinar mucho la verdad. Soy de los que considero que hay que leerla y tener conocimientos jurídicos suficientes para interpretarla sin caer en populismos partidista.
    Lo que sí he leído y escuchado son muchos comentarios que insinuan que es una Sentencia realizada por presiones políticas. Por tanto, están insinuando que un Juez ha tomando una resolución a sabiendas que no es correcta. Entonces se está diciendo que el Juez ha prevaricado no?????? o me equivoco.. En vez de insinuar que interpongan una QUERRELLA CRIMINAL .. no me gusta el caliz que esta tomando este país ni por la derecha ni por la izquierda. Si dices algo .. «pa lante » y con todas las consecuencias. Y sino al menos pide una reforma a fondo tanto del poder Judicial como del sitema de estado. dejemo de solo criticar y mirar hacia el otro lado e insinuar..
    Pd.- no lo digo por ti eh¡¡ que conste.

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    1. Así debería ser, amigo Homero. Si están insinuando que hubo presiones y que el TC cedió a ellas, la sentencia dictada es manifiestamente injusta a sabiendas y por tanto el TC habría prevaricado. Deberían interponer la correspondiente querella criminal; pero claro: eso supondría tirarse piedras a su propioo tejado. En cuanto a verlo con un criterio menos «partidista», lo veo difícil porque el mismo TC es una reproducción en pequeño de las Cortes. O del pacto entre los dos grandes partidos, que en cualquier país serio sería considerada una intromisión intolerable del Poder Legislativo en el Judicial (aunque el TC no se integre en él, es un Tribunal cuya composición deciden los políticos). Del CGPJ es mejor no hablar, no sea que nos lleven presos.

      Y además, en las Batuecas un asunto va «p’alante» o no va «p’alante» según interesa al poder político del momento. Por ejemplo, cuando se pilla de marrón a un político, de entrada tiene que ser un marrón muy visible, porque si no, nadie mueve un dedo. Por ejemplo, lo que hoy ha salido del presidente de la Diputación de Castellón, que al parecer tiene muchos visos de ser delito. Sin embargo, todo el pifostio que organizó Bono a cuenta de lo de Seseña y las nunca dadas explicaciones sobre cómo ha incrementado su patrimonio (y parece ser que de forma no muy legal) no merecen, a juicio del Fiscal General del Gobierno, Conde-Pumpido, que se inicie una investigación penal.

      Así vamos. Y de hecho, el que puede porque domina suficientemente el inglés, hace las maletas y se va.

      Saludos,
      Aguador.

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  2. así es.. Es cierto , que la separación de Poderes no existe. Nunca ha existido. No sólo por que lo dijo A. Guerra en su día sino por que la realidad es otra desde siempre.
    LEGISLATIVO .- PARLAMENTO( EL PSOE = GOBIERNO)
    EJECUTIVO .- GOBIERNO
    JUDICIAL ( EN TEORÍA IMPARCIAL, PERO COMO BIEN DICES EL TC, ES LO QUE ES)
    Siempre ha sido así no se por que ahora se extrañan. Dicho esto, nos toman todos el pelo. P.E tantos recortes ect.. hay se ha planteado de que sirve el senado??? fijate si sirve de poco que alli el PP consigui que no se aprobase la ley del IVA.. y no ha servido de nada ya que no tiene poder ninguno. POs que lo quiten coño¡¡¡
    En cambio lo que tu dices tienes razon. La fiscalía es jerárquica y el fiscal jefe del estado siempre es un hombre dle partido que gobierna. Así que.. es normal que el acusador público depende del fiscal Jefe. Otra cosa es que para eso están las acusaciones particulares etc..

    vamos que nos toman el pelo.

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