Dejo lo mejor para el final: el fracaso de Podemos. Al final sus resultados se han parecido a esto:
Lo más llamativo, con todo, no son los resultados. Han mejorado en dos escaños, lo cual contrasta con las reacciones excesivas que han provocado. Lo cierto es que deberían estar contentos. La confluencia con IU (comunistas línea Moscú) no ha dado todos los buenos resultados que ellos esperaban. Uno supone que esperarían dar el sorpasso (odio esa palabra cuando podemos decir «adelantar») al PSOE y… bueno, se han quedado en 71 escaños. Por eso, a pesar de haber aumentado en dos escaños, la noche electoral y el día siguiente traían una cara de funeral. O más bien, como se ha dicho, de tortasso.
Naturalmente, autocrítica cero. «El fracaso no se debe negar, claro… pero no se debe a que no hubo real confluencia entre IU y Podemos». Se debe a que Pablemos no se arregló esa mañana la perilla. Ajá. Tampoco habrán tenido que ver sus «problemas de financiación» (a otro Montoro le hubiera crujido; pero Pablemos es Pablemos. Viva la igualdad de trato fiscal), que han causado una requisitoria del Parlamento venezolano para dar explicaciones. Por supuesto, Pablemos dará explicaciones en Caracas… cuando le vaya bien.
Ni tampoco habrá tenido que ver que en unos cuantos sitios ya los conocen, como rezaba el chiste que contaban años ha sobre Pepiño, blindado ahora en Bruselas. Los conocen y mucho en Madrid, en Barcelona, en Zaragoza, en Cádiz y en todos aquellos sitios en que gobiernan gracias a que la pesoe les puso en la mano la vara de mando. Es que ustedes a un español le tocan las gambas y la servesita, y el cabreo es monumental. Todo lo que no es perceptible de inmediato para Juan Español se puede tocar o se puede no arreglar. Hasta los impuestos indirectos o la impresión general de la Justicia. Total, que los podemitas en los Ayuntamientos no habrán gobernado mucho —mayormente porque no saben—; pero cabrear al respetable sí lo han hecho, y mucho. Ya se trate de los cambios en el callejero, los morreos blasfemos entre advocaciones marianas o la interactuación entre los vecinos de Gràcia y los okupas vikingos, la especialidad de los alcaldes podemitas ha sido montar el número para que los ciudadanos no les controlaran mientras afrontaban el caos.
A su vez, la no consecución de los objetivos ha provocado que salgan a relucir los cuchillos largos. Hasta tal punto, que el argentino Echenique ha hablado como si la sede del Ministerio del Amor fuera la Lubianka. Hasta aquí nada anormal. Las purgas son el pan nuestro de cada día en la izquierda y raro es el partido de esa orientación que no lleva a cabo al menos una al año. Hasta han acudido al socorrido expediente del pucherazo, que es la versión antigua-moderna de la «conspiración contra el Partido» o del «vendaval antidemocrático», un clásico de Alfonso Guerra. Probablemente VOX tuviera más motivos para sospechar de un pucherazo. Pero claro: como VOX no ha salido, nadie le echa cuenta.
Lo más sorprendente de todo, no obstante, ha sido la catarata de insultos que desde Podemos se ha lanzado a quienes no les han votado. No se sabe si serán bots o personas; pero lo cierto es que para los ancianos poco menos que han pedido una Endlösung. Procedimiento que, como es sabido, no es una originalidad nazi, sino comunista. Matar de hambre a pueblos enteros, o deportarlos a la Siberia central es un invento típico de la época estalinista. Hay que eliminarlos, porque son muchos «y votan al PP». Bajo la falsa pátina del «leninismo amable» sigue estando el comunismo de toda la vida. Evidentemente en ese grupo no están ni Julito el Rojo (un jóveno de 68, que no del 68: más años que el mono Amedio) ni Rosa María Artal, la nueva Rosa de España (otra jóvena con 66 tacos). «Somos el cambio y el progreso. ¿Cómo habéis tenido la cara de no votarnos?». Las alusiones a la ética de Julio Rodríguez todavía son más chuscas.
La conclusión de toda esta larguísima diatriba queda clara: nos hemos librado del peligro rojo a ritmo sabrosón —del ritmo sabrosón no, porque el PP ha sacado una versión merengue de su himno—. Pero eso no significa que hayamos mejorado. Seguimos igual y probablemente continuaremos con la IV Legislatura de ZP. La economía mejorará o no; pero la ingeniería social sigue adelante. Algún día alguien le dirá que están interrelacionadas: el país que más tira adelante es aquél al que le han enseñado a creer en sí mismo y no al contrario. Todo dependerá de las instrucciones que Mariano reciba; pues, como él mismo dijo y aquí hemos puesto de relieve, «esh un mandao».
Ya me parecía a mí….
Muchos pueden ser los motivos por los que la gente no vota a Podemos. Pero Podemos no ve fallos mas allá de los demás. Debe de ser que en la Universidad Complutense y en la Venezuela de Chavez la asignatura de la humildad no existe y se creen tan guais que piensan que caen muy bien a la gente, que nos caen simpáticos, pero no les votamos. La sonrisa-falsa de P.I. no le ha valido….vaya por Dios.
Quizá lo que pasa es que la gente tiene memoria. Recordamos a sus dirigentes como comunistas y en campaña se convirtieron en socialdemócratas. Recordemos a Tania Sanchez cuando decía NO, NUNCA. A PODEMOS NO VOY A IR. PUNTO. Si observamos un poco de cerca a sus dirigentes, vemos que pobres no son. Mas al contrario, son adinerados o de familias adineradas. Bescansa, Monedero o el propio Pablo son personas con un buen respaldo económico a los que no les afectaría la ruina en que dejarían a España, si llegasen a gobernar. Y no hablemos de Echenique. Argentino beneficiario de nuestea sanidad que usaría su nacionalidad argentina como refugio si las cosas se pusiesen feas.
Podemos es lo que es. Populismo para muchos incautos. Incautos que están probando las habilidades de algunos alcaldes, como Kitchi, que se le ha llenado el pleno de gente protestando, o lo que es lo mismo, «¿que hay de lo mío, Kitchi?».
Hasta la próxima, Aguador
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Aprovecho la confianza que me da Luis a la hora de manifestar mi opinión.
Yo no tengo mucha idea de personajes políticos y nombres. Pero sí de las consecuencias tan nefastas de los resultados electorales.
Los resultados electorales son clara imagen del fracaso social. Si la sociedad es imcapaz de luchar y negarse a lo que nos venden los políticos, algo está funcionando francamente mal.
Leyendo los artículos de Juan Manuel de Prada sólo se confirman mis hipótesis que,,además, están basadas en la experiencia. Conste no sé si Prada se decidió todavía por la familia numerosa o no.
No puedo entender que una sociedad de peso pueda dejarse vencer por tal propuesta política de reducción de la natalidad. Conformarse con contratos de mierda, con una vida de mierda en contra de los valores morales, en contra de la familia y de la unidad familiar. Qué sociedad de inútiles y cobardes que se ha dejado lavar el cerebro por semejante campana educativa?.
Está claro, se educa desde la familia y para/contra la familia. Criticamos a esta juventud loca y sin respeto por los ancianos, sin valores. Ellos tienen lo que heredaron. Será que los que han educado forman parte de esa educación errónea, no?. No nacemos educados, nuestra conciencia también se educa.
Lo que no queremos es salir de la comodidad y decir; No, no voy a hacerlo como me manda la sociedad. No quedan hombres/mujeres valientes. No existe el término valentía.
Se educan a los hijos con la siguiente mentalidad. Primero, no se les habla de Dios ni de la muerte. Se les habla de la cultura de la vida de placer fácil, de la libertad sin responsabilidades. Un estado que asume tus posibles errores de debilidad con métodos como la anticoncepción y el aborto. Para pasar un rato de braguetazo guay y sin responsabilidad tenemos el condón o los anticonceptivos. Y si eso no funciona está el aborto o la píldora del día después(ni me interesa el término médico de tal método).El hombre moderno es un ser educado para lo fácil. No necesita decir un no.
La sexualidad ha pasado a ser algo así como una mercancia, sin más. El amor sólo es algo utilitario donde no interviene la voluntad. No se mezcla amor con compromiso ni con el deber ni el sentimiento. La voluntad está a merced de lo que dicten las normas sociales.
Y que no me vengan con ese rollo pataero de que «no tuvimos más hijos porque no pudimos». Eso es en mayor parte mucha mentira social.
Primero, la mujer se cansó de la familia tradicional. Liberarse de la dependencia del hombre (consecuencia: se desrprecia al hombre tradicional) fue una estrategia política bien disenada. Si la mujer trabaja( y no siempre fue necesario), sería más libre. Podría decidir tener sólo un hijo y unas comodidades económicas más que suficientes para no tener que sacrificarse demasiado por ellos. No existe capacidad de entrega, nos hemos dejado llevar por el más puto egoismo. Para qué sacrificarme por unos hijos?, coartar mi libertad?. Para evitar una vida tan esclava el estado te ofrece otra, en realidad mucho más esclava y enganosa. Te promete métodos que te aseguran un placer maravilloso y nula responsabilidad. Te ofrecen un sueldo de mierda para que no tengas hijos y además prometen educar a esos hijos con una educación de mierda donde no existen diferencias de sexos. Ser gay mola tanto que no hace ni falta ser heterosexual. Encima tienes un aborto eficaz que está legalizado y no deja ni huella. Pero TODO ESTO FORMA PARTE DE UN PLAN TRAMPOSO Y MEZQUINO. Porque todo esto deja huella en el ser humano. En tiempos de Santa Teresa de Jesús el hombre luchaba contra enfermedades, guerras y penurias. El hombre moderno actual lucha contra las depresiones, paranoicas y psicopatías. Lo uno fue algo que formaba parte de un proceso natural y normal y lo de ahora forma parte de un proceso planeado maquiavelicamente, consentido y aceptado.
Y quería desahogarme por completo y hablando desde la voz de la experiencia: Hubo un tiempo (entre embarazo y embarazo) que sólo escuchaba comentarios mezquinos y retorcidos de mis amigas. Por qué tienes que tener hijos?. Me aconsejaban hacer como ellas. 1 o 2 era lo ideal. Lo ideal para poder manteneros y poder trabajar los dos. Ideal para decir que soy más libre , independiente y emancipada. Todo mentira y mentirosas. Esclavas de relaciones utilitarias. El marido amaba más el coche o la casa que a ellas. Esclavas de un marido egoista que sólo las consideraba un producto útil de trabajo y no una esposa. Hijos caprichosos y exigentes que son el centro de todo. Pequenos ídolos a los que alimentar y mantener sin grandes exigencias. Todo una campana de mentiras y vida mentirosa. En la actualidad ninguna de ellas es feliz. Son ancianas prematuras con cargas físicas muy grandes ya que se desgastaron de tanto anticonceptivo y de tanto esterilizarse que parecían munecas de disfrute amputadas. Perdieron el gusto por la vida y el café. Perdieron el disfrute del sexo, quedaron asqueadas de él pues jamás lo disfrutaron como mujeres enamoradas y queridas, sólo como mujeres utilizadas. Que les den a todas ellas!. Renunciaron por cuatro perras a lo más maravilloso y esencial que forma parte de nuestro cuerpo femenino; la maternidad.
Les callé la boca a todas y las envié a la mierda. No sigo consejo ni ideología políticas y me he decidido por ser valiente. Creo en Dios profunda y completamente y no dejo que nadie que me quiera arrebatar mis ideas entre en mi vida. Prefiero prescindir de todos ellos.Casi acabaron conmigo con tanto acoso emocional y social y dije; basta. Voy a ser yo misma. Me importa un rábano lo que digan políticos y demás. Vivo mi vida teniendo en cuenta a Dios y el resto va viniendo.
Soy muy feliz y curiosamente , soy muy feliz cuando no sé ni si manana comeré y después de haber pasado por situaciones durísimas, muy duras. Para que vengan a aconsejarme feminazis de mierda o mujeres que no son ni mujeres.Y da pena ver en las redes sociales(Facebook o Twitter) a miles de estas mujeres publicando sus fotitos o sus miles de frases célebres o vendiendo su imagen de mujer intelectual y resultonas para no tener que aceptar que están más solas que nadie. Dan pena!.
Gracias por poder desahogarme.
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Reblogueó esto en Ramrock's Blog.
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