Gaviota herida (y V)
Como les decía, quedan aún unos cuantos flecos por desenredar en todo este asunto. Sin mucho orden, iremos desgranándolos. Continúa leyendo «Gaviota herida (y V)»
Como les decía, quedan aún unos cuantos flecos por desenredar en todo este asunto. Sin mucho orden, iremos desgranándolos. Continúa leyendo «Gaviota herida (y V)»
Volvemos a dar un salto a través de la sierra de Guadarrama y nos plantamos de nuevo en los Madriles. Lo que sucedió en los días siguientes hubiera ameritado que la entrada se titulara algo así como «9 días que hicieron temblar al PP hasta los cimientos». Todo ha sucedido a gran velocidad, pero la resultante por ahora es la siguiente:
Continúa leyendo «Gaviota herida (IV)»
El engarce de las elecciones castellano-leonesas en esta historia es complicado, pero se va a intentar. Animado por el éxito de Díaz Ayuso en Madrid, Mañueco quiere convocar elecciones en Castilla-León. Sin embargo, su situación es harto más complicada que la madrileña: en primer lugar, por los pactos de uno y otra. En Madrid el PP ha creado una entente natural y sin complejos con C’s y con VOX, mientras que en Valladolid Mañueco berrea vade retro Sathana! a la formación verde limón (por consejo/orden de la planta innoble de Génova, 13) cada vez que aquélla intenta un acercamiento. En segundo lugar, la gestión del korona por parte del galeno Igea es mucho más discutible que la de Madrid (la del vallisoletano más alineada con las posturas del Gobierno que con las necesidades de los… ciudadanos: chúpate ésa). Y luego está el hecho menos discutible de que Mañueco tiene menos carisma que una almeja, algo de lo que Díaz Ayuso va más que sobrada.
Continúa leyendo «Gaviota herida (III)»
Pongamos que los conjurados ponen rápidamente manos a la obra, tanto en el Ayuntamiento como en Génova, 13. Y empiezan a buscar trapos sucios a la presidenta, contratando incluso a una agencia de detectives para el trabajo sucio, una de ésas que tanto te busca la infidelidad de un marido o mujer como remueve papeles para construir un caso contra alguien. Y no se los encuentran. Para su mala suerte, la hoja de servicios y todo lo demás de Díaz Ayuso está limpio como una patena. No hay por dónde cogerla. Pero eso no detiene a los conjurados. En política la regla dice que, si no puedes con tu contrincante, prueba suerte con la familia: es fácil encontrar un garbanzo negro en un hermano, tío, primo, padre o madre. Ejemplos los hay para todos los gustos y en toda la extensión de la piel de toro, así que citaremos uno que valga por todos: el famoso y probablemente alejado en el tiempo caso de Mienmano, Juan Guerra para los amigos, que se tomaba sus cafelitos en un despacho prácticamente adyacente al Palacio de San Telmo.
Continúa leyendo «Gaviota herida (II)»
La realidad vuelve a interponerse en el camino de las somaldades que uno quiere contar, pero es que así son las cosas. Vamos a comentar en esta serie de entradas dos asuntos que, aunque puedan parecer de índole distinta, tienen un nexo de unión, que es, naturalmente, Isabel Díaz Ayuso, Presidenta (por ahora) de la Comunidad de Madrid.
Continúa leyendo «Gaviota herida (I)»
La ortodoxia socialdemócrata dicta que los impuestos han de mantenerse tal cual y, si es posible, subirlos. Díaz Ayuso ha hecho exactamente lo contrario: los ha bajado hasta donde le permite la ley, lo que descompone los rizos a Marisú haciéndola parecer la hermana de la Medusa. Marisú ve que el incremento de población empresarial en Madrid no se corresponde con una subida, sino con una bajada de impuestos y eso desata su furia. Por no hablar de la de los socios catalanes y valencianos de la pesoe: «És que fa dumping fiscal», berrean. Lo que hace Díaz Ayuso, al obrar así, es poner en evidencia a esos otros monos envidiosos y a su política de Països Catalans en un caso, y las collonaes del valenciano y su cuadrilla para tapar su mala gestión en el otro. Freír a impuestos al respetable cuando las estamos todos pasando de a kilo es política deleznable… pero no parece que ni en Barcelona ni en Valencia sepan hacer otra cosa.
Continúa leyendo «Monos envidiosos (y III)»
De la relación anterior se desprenden dos cosas: primera, que las mujeres son tan capaces de dirigir una Comunidad de Madrid como los hombres, con lo cual queda vedada la posibilidad de llamar cerdo machista a quien dirija la Comunidad de Madrid. Y aunque, nuevamente, algunos comunicadores han jugado esa carta contra los ocupantes de la planta innoble de Génova, 13, un servidor de ustedes no cree que la cosa vaya por ahí. Tengo mi teoría, que ahora mismo les presento.
Continúa leyendo «Monos envidiosos (II)»
A riesgo de que parezca que uno padece madricentrismo, que podríamos definir como esa visión de la realidad que afecta a gran parte de los comunicadores según la cual «todo lo que sucede fuera de Madrid no existe», hoy seremos un poco menos so-malos, interrumpiremos nuestra serie sobre el korona (se promete continuarla) y pondremos que hablo de Madrid.
Continúa leyendo «Monos envidiosos (I)»
Pues nada. Que ahora, para distraer al personal, el Gobierno se ha inventado la treta de desempolvar el caso de la Púnica, que creíamos que la cosa había acabado con Paquito Granados y sus conexiones diversas. De pronto, resulta que no. Resulta que hay elecciones –pese a los dimes y diretes de unos y otros– el 10 de noviembre y el Gobierno de la pesoe, siempre presto al juego sucio (éste, además, a varias bandas), ha sacado a pasear el tema de la Púnica, que dormía desde hace varios años en los cajones de la Audiencia Nacional. Hay que perjudicar … Continúa leyendo Juicio al símbolo
El segundo pico informativo ha sido la investidura de Isabel Díaz Ayuso como flamante nueva presidenta de la Comunidad de Madrid. Con ello se puede decir que se ha cerrado un círculo: el PP ha retenido la presidencia de la comunidad y ha recuperado la alcaldía, aunque esto último haya sido «en compañía de otros» (Cs y VOX, que menudo sainete nos regalaron a cuenta de «yo voy a ser la alcaldesa/porque yo lo valgo»). Díaz Ayuso responde, al parecer, al prototipo de política de derechas que no se arruga en el debate contra la «izquierda» (de nada sirve diferenciar … Continúa leyendo Verano blues (II)